La Cirugía Endoscópica Facial se realiza por medio de la cirugía endoscópica de alta tecnología.
A través de unas pequeñas incisiones dentro de zonas cubiertas por el cabello frontal y/o temporal, y con la ayuda de un endoscopio que aumenta la imagen 32 veces su tamaño normal, se consigue despegar la piel en la zona frontal para elevar y ascender los tejidos de frente, cejas, periórbita lateral y región de los pómulos según cada caso, protegiendo al mismo tiempo las estructuras nerviosas y vasculares que otras técnicas quirúrgicas dañan. Se suspenden en su nuevo sitio mediante implantes absorbibles fijados directamente al hueso o a la fascia.
Los resultados son muy naturales y no existen complicaciones particulares. Las cicatrices son mínimas (1,5 cm.) Y escondidas en el pelo.